El estruendo del Universo.

Uno cree que fuera de la Tierra no hay nada. Ni luz, ni ruido. Uno queda maravillado cuando cuando descubre que esta totalmente equivocado y, afortunadamente, hay vida más allá de donde alcanza mi mirada. Que, por cierto, no es mucho. Uno queda maravillado cuando oye los sonidos del Universo.

Pero uno vuelve a la realidad cuando escucha algo tan sencillo como un: Necesito ayuda.

La frase apenas ha sonado cuando ella me lo ha dicho. Se lo he tenido que hacer repetir. Entonces me ha explicado que esta intentando hacer comprender a su marido que no puede con todo, que necesita ayuda. Él trabaja, cada vez más horas. Cada vez más ocupado. Sin apenas tiempo de escucharla. Ella con su hija, con la casa y con la EM. Y no puede. Necesita ayuda.

Debe ser que, el estruendo del Universo, no le deja escuchar a su marido esa simple petición. No le esta pidiendo el Sol, solo le esta pidiendo algo que les dijeron cuando se miraban con una sonrisa cómplice: "En la salud y en la enfermedad". Pero él tiene tanto miedo de la enfermedad que se hace el sordo. Deja que ella lucha contra todo, pero no puede. Necesita ayuda. Y le pondrán una asistenta social. Y su familia dirá que lo que haga falta. Y él dirá que por dinero que no quede. Pero es mucho más sencillo lo que le pide. Que la vuelva a mirar como aquel día en que, el Universo, se detuvo. En que solo había un sonido. El de sus corazones latiendo al unísono. A veces siento vergüenza de ser hombre porque no me identifico con estas,y otras aptitudes de los "sabios hombres", pero mi mano y lo que necesite estará para ayudarla, ella lo sabe, cuando diga "necesito ayuda". Algo tenemos en común y se llama Esclerosis Múltiple. Aprendemos muchas cosas gracias a la enfermedad, entre otras, a escuchas palabras diferenciandolas del estruendo del Universo.

• Mientras escribo esto, estoy escuchando: Sylvia (Focus)