Un paseo sobre la arena.


Sigo caminando sobre la playa, veo algo escrito en la arena. Son unas iniciales que, quizás dejó una pareja de enamorados la noche anterior. Las marea aún no ha podido borrarlas. Dejo que mi imaginación vuele tras esos trazos.

Me los imagino mirándose el uno al otro, al despertar, con una sonrisa como si nada existiera a su alrededor. Como si el Universo se hubiera detenido y les estuviera mirando.

Sus labios vuelven a recordarse que están el uno por el otro, que no hay nada que los detenga. Ellos tienen el tiempo en sus manos.

Mi imaginación se detiene y continuo andando por la playa. El suave rumor de las olas acompañan mi lento caminar. Me detengo y miro hacia la Mar.

Siento frió, me siento pequeño ante tal inmensidad pero feliz al mismo tiempo. Pienso si seria capaz de navegar en aquella inmensidad cuyo horizonte veo como una linea en la que todo se pierde, en la que todo cae. Incluso mis pensamientos se están perdiendo, allá en el horizonte.

Por unos instantes sonrió y todo a mi alrededor parece empujarme a una locura de colores y sonidos que nunca había sentido. Al fin, me detengo y disfruto de ese momento.

Se que es algo muy sencillo, el pasear. Se que no a todos les hes permitido ese sencillo placer. Pero, también se, que algunos renuncian voluntariamente a ese placer y se quedan solos en casa delante o bien del televisor o bien del ordenador. Se que cada persona describiría ese paseo de una maneara distinta a la mía, porque cada persona lo viviría de una manera distinta a mí.

Pero, para describirlo, hay que vivirlo. Tengo muy claro que, la EM, parara mi cuerpo cuando ella quiera pero, mientras tanto, yo no parare de pasear, hacer, vivir y describir aquello que siento. Espero que sean muchas personas, me consta que si, quienes lo hagan. Además tengo la inmensa suerte de llevar a alguien cogida de la mano, caminando junto a mi por la arena.

  • Mientras escribo esto, estoy escuchano: Streets of Philadelphia (Bruce Springsteen)

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